Su Majestad el Tomate su historia y beneficios
27 Oct 2022
La historia
El tomate silvestre, o Solanum lycopersicum, es originario del suroeste de América. Comenzó a extenderse en el siglo XVI y fue introducido en Europa por los conquistadores españoles. Hoy en día se cultiva en todo el mundo, aunque en la época precolombina sólo se conocía en América Central y del Sur.
Como siempre que se trata de jardines y huertos, los tomates fueron utilizados por los mayas y los aztecas, que los cultivaban en el sur de México.
Se dice que los conquistadores españoles descubrieron esta maravillosa planta durante una inspección en la selva amazónica. Mientras caminaban entre los árboles, se encontraron con un montón de hojas que no parecían seguir ninguna regla en particular, así que decidieron recogerlas.
Obviamente, los conquistadores no conocían la planta en cuestión, pero tras estudiarla detenidamente, decidieron llamarla "tar-nip", que significa hoja en español.
De vuelta a casa y tras recoger algunos tomates en el jardín para comprobar su frescura, se dieron cuenta de que los frutos eran muy parecidos a las hojas, por lo que decidieron llamarlos "tomates", nombre derivado de la palabra "tomate", que significa "tomate" en español.
Una planta de tomate silvestre puede alcanzar los dos metros de altura y tiende a crecer en grandes y densos racimos. Las hojas son grandes, de color verde oscuro con márgenes amarillos o rosados. Los tallos llevan grandes hojas con 5-7 lóbulos; los estigmas son redondeados o puntiagudos unidos a ellos. Las bayas amarillas o rojas, más pequeñas en este último caso, están rodeadas de cinco o seis lóbulos. La planta produce muchas semillas de color blanco y de unos 2 cm de longitud, con una forma discoidal puntiaguda en el extremo.
El nombre de manzana dorada proviene de un tomate amarillo dorado. Hoy en día hay muchos colores de tomates, pero el color rojo es el más común.
¿Cuáles son los beneficios de los tomates?
El tomate es un alimento muy digestivo, con muy poca grasa y muchas vitaminas (A, C y E) que ayudan a mantener la piel perfecta.
Estamos hablando de un verdadero concentrado de vitamina C, que está contenida en altas proporciones tanto en la piel como en la pulpa: basta con masticar unas hojas de tomate fresco durante unos minutos para tener una prueba de ello. La vitamina C es esencial para la producción de colágeno, un importante tejido conectivo que permite al organismo resistir la agresión inmunitaria y los radicales libres. Totalmente libre de calorías y bajo en grasas, no contiene ni siquiera un 1% de proteínas.
El tomate es una fruta que encierra los beneficios de la vitamina C: su delicada pulpa contiene 10 veces la cantidad necesaria de esta vitamina para un adulto medio.
Precisamente por su alto contenido en potasio, el tomate es útil contra las enfermedades del corazón: de hecho, gracias a sus sales hidratadas, es capaz de contrarrestar los calambres cardíacos.
¿A qué categoría pertenece el tomate?
¿Quién iba a pensar que el tomate, un ingrediente que comemos a menudo y con el que disfrutamos tanto, podría ser tan intrigante? El tomate cultivado se conoce en botánica como Solanum lycopersicum (o Lycopersicon esculentum según la normativa fitosanitaria). Esta planta pertenece a una familia llamada "Solanaceae" que cuenta con más de 5.000 especies. Sus frutos rojos son un icono de la cocina mediterránea y de Italia en particular.
¿Por qué el tomate hace perder peso?
La temporada de verano es una época de retención de líquidos y aumento de peso, pero con el bajo contenido calórico del tomate y su riqueza en fibra y agua, puede ayudarte a vencer estos problemas. Los tomates contienen un 95 por ciento de líquidos que favorecen la diuresis para combatir esos molestos kilos de más.
¿Qué daño hace comer demasiados tomates?
Los tomates son un elemento básico en las recetas de verano, pero pueden ser duros para el estómago. Consumir demasiados tomates puede provocar ardor de estómago o empeorar los síntomas de la enfermedad de reflujo gastroesofágico.
Los platos de tomate siempre parecen la comida perfecta para los días de calor en los que se busca algo refrescante y ligero, ¡hasta que llega la hora de digerirlos después! Los tomates tienen algunas propiedades que los hacen ácidos en lugar de alcalinos (a diferencia de otras frutas).
El tomate silvestre, o Solanum lycopersicum, es originario del suroeste de América. Comenzó a extenderse en el siglo XVI y fue introducido en Europa por los conquistadores españoles. Hoy en día se cultiva en todo el mundo, aunque en la época precolombina sólo se conocía en América Central y del Sur.
Como siempre que se trata de jardines y huertos, los tomates fueron utilizados por los mayas y los aztecas, que los cultivaban en el sur de México.
Se dice que los conquistadores españoles descubrieron esta maravillosa planta durante una inspección en la selva amazónica. Mientras caminaban entre los árboles, se encontraron con un montón de hojas que no parecían seguir ninguna regla en particular, así que decidieron recogerlas.
Obviamente, los conquistadores no conocían la planta en cuestión, pero tras estudiarla detenidamente, decidieron llamarla "tar-nip", que significa hoja en español.
De vuelta a casa y tras recoger algunos tomates en el jardín para comprobar su frescura, se dieron cuenta de que los frutos eran muy parecidos a las hojas, por lo que decidieron llamarlos "tomates", nombre derivado de la palabra "tomate", que significa "tomate" en español.
Una planta de tomate silvestre puede alcanzar los dos metros de altura y tiende a crecer en grandes y densos racimos. Las hojas son grandes, de color verde oscuro con márgenes amarillos o rosados. Los tallos llevan grandes hojas con 5-7 lóbulos; los estigmas son redondeados o puntiagudos unidos a ellos. Las bayas amarillas o rojas, más pequeñas en este último caso, están rodeadas de cinco o seis lóbulos. La planta produce muchas semillas de color blanco y de unos 2 cm de longitud, con una forma discoidal puntiaguda en el extremo.
El nombre de manzana dorada proviene de un tomate amarillo dorado. Hoy en día hay muchos colores de tomates, pero el color rojo es el más común.
¿Cuáles son los beneficios de los tomates?
El tomate es un alimento muy digestivo, con muy poca grasa y muchas vitaminas (A, C y E) que ayudan a mantener la piel perfecta.
Estamos hablando de un verdadero concentrado de vitamina C, que está contenida en altas proporciones tanto en la piel como en la pulpa: basta con masticar unas hojas de tomate fresco durante unos minutos para tener una prueba de ello. La vitamina C es esencial para la producción de colágeno, un importante tejido conectivo que permite al organismo resistir la agresión inmunitaria y los radicales libres. Totalmente libre de calorías y bajo en grasas, no contiene ni siquiera un 1% de proteínas.
El tomate es una fruta que encierra los beneficios de la vitamina C: su delicada pulpa contiene 10 veces la cantidad necesaria de esta vitamina para un adulto medio.
Precisamente por su alto contenido en potasio, el tomate es útil contra las enfermedades del corazón: de hecho, gracias a sus sales hidratadas, es capaz de contrarrestar los calambres cardíacos.
¿A qué categoría pertenece el tomate?
¿Quién iba a pensar que el tomate, un ingrediente que comemos a menudo y con el que disfrutamos tanto, podría ser tan intrigante? El tomate cultivado se conoce en botánica como Solanum lycopersicum (o Lycopersicon esculentum según la normativa fitosanitaria). Esta planta pertenece a una familia llamada "Solanaceae" que cuenta con más de 5.000 especies. Sus frutos rojos son un icono de la cocina mediterránea y de Italia en particular.
¿Por qué el tomate hace perder peso?
La temporada de verano es una época de retención de líquidos y aumento de peso, pero con el bajo contenido calórico del tomate y su riqueza en fibra y agua, puede ayudarte a vencer estos problemas. Los tomates contienen un 95 por ciento de líquidos que favorecen la diuresis para combatir esos molestos kilos de más.
¿Qué daño hace comer demasiados tomates?
Los tomates son un elemento básico en las recetas de verano, pero pueden ser duros para el estómago. Consumir demasiados tomates puede provocar ardor de estómago o empeorar los síntomas de la enfermedad de reflujo gastroesofágico.
Los platos de tomate siempre parecen la comida perfecta para los días de calor en los que se busca algo refrescante y ligero, ¡hasta que llega la hora de digerirlos después! Los tomates tienen algunas propiedades que los hacen ácidos en lugar de alcalinos (a diferencia de otras frutas).
Sample Image Gallery
Sample Block Quote
Praesent vestibulum congue tellus at fringilla. Curabitur vitae semper sem, eu convallis est. Cras felis nunc commodo eu convallis vitae interdum non nisl. Maecenas ac est sit amet augue pharetra convallis.
Sample Paragraph Text
Praesent vestibulum congue tellus at fringilla. Curabitur vitae semper sem, eu convallis est. Cras felis nunc commodo eu convallis vitae interdum non nisl. Maecenas ac est sit amet augue pharetra convallis nec danos dui. Cras suscipit quam et turpis eleifend vitae malesuada magna congue. Damus id ullamcorper neque. Sed vitae mi a mi pretium aliquet ac sed elitos. Pellentesque nulla eros accumsan quis justo at tincidunt lobortis deli denimes, suspendisse vestibulum lectus in lectus volutpate.